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En medio de reflexiones sobre el exilio y de pistas acerca del asesino en serie, Tardarás un rato en morir, de Imanol Caneyada, es una novela que va más allá de un crimen no resuelto explorando el andamiaje del poder y la traición…
Reseña
Portada de la obra. Tomada de Internet
Por Josué Barrera
-Especial para Culturadoor.com, desde Hermosillo, México—
Día de publicación: 25-Noviembre-2010
Sergio Pitol, el viajero y confabulador incansable, dice que uno es una suma mermada por infinitas restas. Dejando al lado las sustracciones, la suma que es Imanol Caneyada, el autor que ahora nos tiene aquí, da como resultado una serie de diversas experiencias que nos comparte en cada uno de sus libros: Los ahogados no saben flotar (2000), Un camello en el ojo de la aguja (2003), Tiempo de conejos (2006), Historias de la gaya ciencia ficción (2002) y Las voces de la arena (2010), por mencionar sus tres novelas anteriores y sus dos libros de cuentos.
Tardarás un rato en morir, la más reciente novela del autor, es una muestra de los temas más concurridos en su obra: la política y la violencia. A estos dos temas se une otro más: el exilio, que más que un tema es una condición que Caneyada ha tenido desde que dejó su natal España hace más de dos décadas, escribiendo su obra literaria y su trabajo periodístico en el norte de México.
La novela transcurre sobre todo en Montreal, a partir de que Martín Torrevieja “el Tinín” y Juan José Salvatierra “el Cabezón” llegan a esta ciudad una vez que el primero de ellos termina su sexenio como gobernador de un estado de México. Ambos son amigos desde la infancia, formando una pareja inseparable aún con las marcadas diferencias. Mientras que Martín es un joven triunfador que ha tenido suerte con las mujeres, en los deportes y en su carrera política, Juan José es el amigo que ha sido testigo de sus logros, apoyándolo desde joven hasta ser su secretario particular, a pesar de su fealdad expuesta en una cabeza extremadamente grande.
En esta ciudad, ambos personajes conocen a un joven inspector de la policía de Montreal, Aitor Pelletier, que investiga el caso de un asesino en serie. Las desgarradoras muertes que aparecen en un país sumido en la tranquilidad, van de la mano del fantasma violento que persigue tanto a Martín como a Juan José. Los tres personajes, en apariencia disímiles, tienen en común el temor a perder ante un ambiente de incertidumbre: la espera de una llamada telefónica, frases poéticas escritas en el lugar del crimen y la repentina aparición de una joven que puede redimir la existencia del personaje más triste y entrañable de la novela: el Cabezón.
Mientras tanto, la nieve no deja de caer en una ciudad que se vuelve extraña para los propios habitantes canadienses y aún más para los dos mexicanos que se encuentran en el exilio. Precisamente es en ese destierro cuando los roles de los dos amigos empiezan a cambiar: el ex gobernador ya no tiene el poder absoluto y su secretario representa la salvación a la que aspira. Compuesta por treinta y seis capítulos pequeños estratégicamente acomodados dando saltos en el tiempo y cambiando de narrador, el propio lector va entrelazando los pensamientos de Juan José, la zozobra de Martín y los temores de Aitor.
En medio de reflexiones sobre el exilio y de pistas acerca del asesino en serie, Tardarás un rato en morir es una novela que va más allá de un crimen no resuelto explorando el andamiaje del poder y la traición, así como el de la violencia y la soledad de los personajes. Ganadora del Concurso del Libro Sonorense en 2008, esta novela es una muestra representativa de la narrativa que se está escribiendo en el norte de México, que si bien no está exenta del narcotráfico, tema que parece estar de moda, su principal interés es hablar sobre otras realidades más humanas.
Imanol en acción..Imagen tomada de su cuenta en Facebook
